martes, 24 de mayo de 2016

Líder dinámico y visionario

Pablo, Nehemías y Jesús.
Pablo
Después haber encontrado con Jesús, fui a Jerusalén para encontrarse con los discípulos para así como forma de adquirir información antes de emprender su ministerio. Aquí se encuentra un tipo de planificación previa.
Seguido a eso, se planificó para alcanzar a su pueblo, pero cuando este último le rechazó se fue a llevar el evangelio a los gentiles. Siguiente el curso de su ministerio, Pablo tenía bien trazado un plan. Además de abrir iglesias en cada ciudad y aldea donde pasaba también, visitaba a su rebaño. A los que no logró visitar los enviaba cartas pastorales.

Jesús
Él de su parte, aceptó venir a morir para rescatar al ser humano, sin embargo, él trazó una planificación previa. Al aceptar venir y nacer como cualquier hombre común, era para identificarse como los humanos cargan sobre sí la maldición que era reservada a todos los pecadores.
Para Jesús pudiera llevar a cabo su misión escogió a 11 discípulos, los formó y los ordenó que se fuera a predicar el evangelio a todas las aldeas.
Todos los pasos de Jesús dejan claro que él tenía un plan estratégico. Si bien, cuando agonizaba en Getsemaní en la noche antes de su entrega, rogaba al Padre que le alejaba la copa amarga, pero, sin querer hacer su propia voluntad sino la de su Padre. Viéndolo así, luchó consigo mismo hasta cumplir con el plan divino de su Padre, Dios Altísimo.

Nehemías
Si Nehemías no hubiese llevado a cabo una investigación previa, no habría podido calcular todo lo que iba necesitar para la construcción de la muralla. Una de las características que tuvo Nehemías que se encuentra inusual en los líderes de hoy, es la humildad y discreción. Él no andaba infundiendo falsas esperanzas con proyectos irreales al pueblo. Antes de dar a conocer el plan maestro, se aseguró de las estrategias de métodos sabios que lo llevarían al éxito del cumplimiento de tal hazaña.
Por lo tanto, se puede observar que Nehemías es recolector de gente, él pudo reunir al pueblo a su lado para emprender la obra empezando con los ancianos hasta los más jóvenes. Además, él se preparó para cualquier ataque del enemigo ordenando al pueblo en un trabajo arduo y vigilante. Nehemías era un hombre optimista, valiente y de una fe genuina en Dios. No se dejó intimidar ante las amenas y situaciones adversas, sino siguió adelante animando a sus colaboradores a través de su propio ejemplo de un líder incansable.

Finalmente, estos tres personajes bíblicos eran visionarios, dinámicos y estrategos.


Pr. Pierreson François

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